martes, 23 de marzo de 2010

LOS DETALLES DE PERDONAR Y PEDIR PERDON


Por: ANDREA CONSTANZA OVIEDO SUSA
En la práctica diaria existe una clave suprema que asegura el triunfo de cualquier pareja, la capacidad de perdonar y pedir perdón; y que esta actitud depende de la forma con que aceptemos los defectos del propio cónyuge a medida que los vayamos descubriendo y esforzándonos por comprenderlos e incluso amarlos. Y es que por más de que cada uno luche por corregir sus faltas en el transcurso de la vida, estos problemas estarán presentes en las relaciones de pareja que en algunos casos lo mejor es dejarlos pasar por alto, así se tenga el firme conocimiento de que aun que las apariencias den a entender lo contrario, no debemos pensar de que nunca realiza nada con intención de fastidiarnos, por el contrario se debe pensar que las disposiciones hacia el otro son el de hacerle la vida lo más agradable posible, pues hay que tener en cuenta que el herir o el descuido se puede tolerar fácilmente, y otra muy distinta en una relación en este caso de pareja es el herir o hacer daño de manera consciente y predeterminada, donde la mejor manera de disculparse es cuando todo está en completa calma y sin ningún tipo de tensiones.
Tal vez por eso el perdonar y solicitar el perdón constituye una de las pruebas más significativas que encontramos en el amor verdadero, que se siente hacia la otra persona ya sea amor maternal, de hermanos, amigos o de pareja, donde la principal capacidad de perdonar, olvidar y curar esas huellas que pudieron dejar en nosotros; donde lo único que consigue es el adoptar una aptitud rencorosa que en cada discusión lo único que provoca es el cruce de ofensas, lo cual hace que la convivencia se convierta en un ambiente cada vez más complicado en espera de un intercambio de perdones “yo te perdono si tú me perdonas”. Lo importante en estos casos es reconocer el error, y para ello es necesario promover desde la familia que la forma de perdonar y pedir perdón se convierta en algo natural.
De esta manera podemos analizar que la clave de perdonar es el amor, pedir perdón con el alma, de hecho el perdón puede ser concedido sin decir una sola palabra, pues puede bastar con una simple sonrisa para demostrar que en nuestro interior no existe ningún rencor. Por eso cuando actuamos con esa sincera intención siempre gozaremos de una paz y una tranquilidad para ser cada día mejor.

2 comentarios:

  1. Creo que les he dado ejemplo, con el pedir excusas y de ser, el perdón. Es muy dificil reconocer que uno se equivoca. Pero es el alimento màs importante para el espíritu saber que se pidió de corazón, para enmendar el error. Un abrazo por este artículo.

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  2. Andrea, buen mensaje y me pusiste a pensar, me gusto el tema y como lo desarrollaste

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