viernes, 17 de septiembre de 2010

LEY DE PRIMER EMPLEO


Desde la campaña presidencial en los distintos discursos del entonces candidato Juan Manuel Santos se veía la incoherencia entre el modelo de generación de empleo que podía impulsar y su constante insistencia en no desmontar o afectar las rentas parafiscales. Hoy una de las principales propuestas del presidente santos para la generación de empleo materializa esas preocupaciones (La ley de primer empleo). Esta que no es más que la continuidad de la lógica neoliberal de darle más y más incentivos a los empresarios a costa de lo que sea, en esta oportunidad como se temía a costa de los parafiscales.
El proyecto ley presentado en la cámara de representantes dice en su artículo 3 (incentivos), en el numeral 2 que. “los incentivos a que se refiere la presente ley. Serán aquellos que reduzcan el valor que por concepto de impuestos parafiscales deban trasladar los empleadores a las entidades beneficiarias de estos recursos, cuya destinación sea la capacitación, como el SENA, ICBF, entre otros.” Es decir que se reducirá en un porcentaje el pago de estas rentas parafiscales. En el numeral 5 dice que el gobierno determinará el tiempo del “beneficio” que no será menor a tres años. Está claro, no hay cabida para interpretaciones que atenúen la magnitud del problema, es evidente que Juan Manuel Santos atiende casi al pie de la letra las manifestaciones de ASOFONDOS, ANIF y FEDESARROLLO, quienes durante mucho tiempo han argumentado que la generación de empleo está condicionada a la eliminación de los parafiscales.
De nuevo vuelve y juega la teoría de darle condiciones a los empresarios “para generar empleo”, la misma que en 2002 logró la aprobación de la ley 789, la que desmontó la relación laboral del contrato de aprendizaje, y redujo el pago de recargos nocturnos, festivos y dominicales a los trabajadores colombianos y además incentivó la explotación laboral por medio de las C.T.A.
En conclusión todo este modelo POSFORDISTA (en el que se flexibilizan las garantías laborales, se afecta la estabilidad, desaparece la relación laboral, en el que el trabajador es desechable y el estado cada vez tiene menos injerencia en los asuntos laborales) se ha apoderado de las políticas públicas de nuestro país. Por eso no es raro que este gobierno pretenda implementar todas sus políticas enfocadas a esa flexibilización laboral, la privatización de la seguridad social, el aumento de las edades y requisitos para la pensión, la desaparición de los regímenes especiales de salud, la eliminación de las rentas parafiscales, etc.

WILSON ARMANDO ROJAS SANCHEZ

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